Entrevista a Vulk: «No nos interesa nada tener una fórmula a la que sacar partido»


Foto: Xabier Ojinaga

A finales de enero se publicó «Vulk Ez Da», el tercer disco del cuarteto vasco Vulk, un punto de inflexión en la carrera de la banda, embarcándose en una gira en la que presentarán el álbum en Valencia el 27 de mayo. Julen Alberdi, guitarra de Vulk, nos responde en esta entrevista a las cuestiones formuladas por nuestra redactora Patricia Alambiaga.

Club Pilotos Suicidas – El título de vuestro nuevo álbum “Vulk ez da” (Vulk no es) es muy directo y rotundo, parece toda una declaración de intenciones de origen existencialista, casi nihilista, que viene a cuestionarlo todo. ¿Qué os ha motivado a elegir este título y qué concepto general orbita entorno a esta negación?
Julen Alberdi – Para nosotros fue inspirador hacernos preguntas clave: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? Fue una forma de reubicarnos tras varios años funcionando de una forma “no tan consciente”, sin ser esto algo malo. Simplemente hicimos una especie de check point en plan, hemos llegado hasta aquí con esto, ¿ahora qué? Los últimos años han tenido buena carga de decisiones tanto vítales como artísticas importantes para todos y eso se refleja en lo que hemos estado trabajando juntos. Nos interesaba la negación como una forma de abrir,
nada que ver con cancelar ni cosas así. Viene básicamente de algo que en algún momento supongo que pasa a cualquier banda que lleve un tiempo tocando: preguntarse qué tal va el balance entre lo que proyecta tanto hacia dentro, en sus propios miembros, como hacia fuera, a la gente que la escucha y la ve.

CPS – La portada de vuestro álbum concede precisamente todo el protagonismo a esta frase de una manera muy poderosa a través de unas angulosas letras talladas sobre madera, como el que graba un lema sobre una superficie sólida para tenerlo bien presente a través de los tiempos. ¿Cómo surge la idea de esta portada?
JA – La idea de llevar el titulo a formato tridimensional viene en el mismo momento en el que decidimos titular al disco de esta manera. Descartamos trabajar únicamente una tipografía o un formato de diseño gráfico porque nos interesaba la paradoja que genera tallar la frase en madera: por un lado pasa lo que dices, tiene una gran presencia y este rollo de “para la posteridad” pero a la vez se convierte en una movida escultórica, con sus luces y sombras, sus direcciones, sus texturas y demás detalles que te llevan a abstraerte de la propia frase y verla como algo físico.

CPS- “Vulk ez da” parece recoger la herencia de vuestros álbums anteriores, “Beat Kamerlanden” (2017) y “Ground for Dogs” (2018), pero tornándola más enérgica y con momentos sonoros más abruptos. Entre disco y disco, ¿ha habido un deseo consciente por cuestionar vuestra manera de componer, vuestro sonido, etc. para explorar otras maneras de hacer que os lleven hacia un punto de inflexión o es simplemente una evolución que se ha producido de manera natural?
JA -Es básicamente nuestra manera de trabajar. Podemos tener tendencias o
cadencias por todos los años que llevamos juntos, pero no nos interesa nada tener una fórmula a la que sacar partido. Cada vez que empezamos un tema no tenemos ni idea de como va a acabar siendo. Nos subimos al carro de sacar provecho de sorpresas que surgen por el camino, o incluso los errores. Todo lo imprevisible en general. Puede ser que para estas canciones, al tener claro que las íbamos a grabar en directo, hayamos tratado de tener más empaque de en trabajos anteriores, simplemente porque trabajando con este método no puedes dejar muchos cabos sueltos, lo ideal es que esté todo en su sitio.

CPS – En este nuevo disco se ha consumado un cambio en la formación con la incorporación de Jangitz a los mandos de la batería. Este cambio, aunque se haya gestado de manera progresiva ¿ha supuesto encontrar una nueva dinámica como banda?
JA – Claro. Tener un grupo es pasar muchísimas horas juntos: tocando, pero también conviviendo, compartiendo ideas, discutiendo, pasándolo increíble… Por eso todos somos “piezas” que damos forma al proyecto. Así dicho parece que nos instrumentalizamos a nosotros mismos, pero lo que quiero decir es que el hecho de que uno de nosotros esté o no, o venga otra persona, cambia completamente el juego. Jangitz, como bien dices, entró poco a poco, fue una transición suave con la marcha de Chavi. Por eso, los cambios que han venido con él se han hecho más evidentes al cabo de un tiempo. Especialmente se podría reseñar que el uso mayoritario del euskera frente a ingles u otras lenguas lo ha propiciado él. Es algo que siempre había estado flotando ahí, pero él, que tiene mucha seguridad con este tema, terminó de convencernos.

Foto: Aitor Mendilibar

CPS – Las letras de “Beat Kamerlanden” estaban compuestas en inglés, en “Ground for Dogs” encontramos temas en inglés y dos en euskera, mientras que “Vulk ez da” es un álbum compuesto íntegramente en euskera. ¿Qué os ha motivado a grabar este disco en euskera? ¿Este cambio lingüístico ha repercutido de algún modo sobre la sonoridad del álbum?
JA -Realmente nunca nos ha importado la etiqueta de grupo que canta en x idioma. Además de lo que mencionas, tenemos maquetas sin publicar previas al primer disco con letras en euskera, y algunas canciones que mezclan los dos idiomas. Siempre hemos estado “probando” en este aspecto. Pero como te decía, Jangitz nos ha ayudado a darle otra dimensión, no tanto al idioma sino al acto de cantar. Con el inglés, la voz tenía un punto más pausado, más meditado. Daba más sensación de ser un instrumento más que se unía al resto, con letras sugerentes y metáforicas. Ahora, por el momento en el que estamos y por tener una pulsión más expresiva que nunca, el euskera funciona mejor. Andoni canta en una lengua que usa en el día a día, y eso te hace comunicarte con más elocuencia. Es un poco paradójico pero tengo la sensación de que en euskera se expresa de una manera mucho más universal, aunque la lengua sea totalmente minoritaria en comparación con el inglés. Da más margen de improvisación, básicamente. Si yo rompo cuerda en medio de un concierto y los demás siguen con el tema mientras la cambio, a Andoni le va a salir cantarse unas frases improvisadas, algo parecido a los bertsos tradicionales de aquí. Eso define bastante bien el “porqué” de hacer este disco en euskera.

CPS – Os hemos visto actuar en directo y sin duda transmitís una fuerza contestataria de lo más contundente. El hecho de haber grabado este disco en analógico y tocando los cuatro a la vez, ¿expresa un deseo de condensar toda esa fuerza del directo en el disco de estudio? En este sentido, ¿cómo ha sido el proceso de grabación para vosotros? ¿Os ha permitido ese proceso de grabación un mayor margen para la espontaneidad y la improvisación?
JA – Esto siempre es un dilema, porque una cosa es emular la energía del directo mientras grabas un disco y otra distinta es que el disco suene como un directo. La primera es posible, y es lo que hemos procurado hacer: generar un ambiente muy cómodo en el que los cuatro estuviésemos tocando a la vez con el mejor sonido posible, como cuando nos subimos a un escenario. La segunda idea es poco factible, casi un quiero y no puedo. Hay que ser consciente de que en un concierto hay factores irrepetibles en una pieza grabada: el volumen y la propia física de cada lugar donde toques, la energía del publico, el tener visualmente a la banda delante… esas cosas no se pueden traspasar a una canción. Se pueden sugerir, pero dándose cuenta de la diferencia de formatos para no quedarse a medio camino. Ahora, en relación a lo que preguntas, la grabación ha estado planteada de una forma muy parecida a un ensayo o un concierto: todos en la misma sala, sin claqueta, sin cortes, haciendo la canción de arriba abajo en las mínimas tomas posibles… iba todo bastante controlado pero siempre había una puerta abierta a que surgieran ideas de forma espontánea mientras se grababa, y así fue.

CPS – Vuestro videoclip “Vulk ez da” parece muy metáforico sobre vuestra evolución como banda. En la primera secuencia vemos a los 4 miembros originales de la banda reproduciendo la portada del “Ground for Dogs”, inmediatamente después cada uno toma posiciones sobre el escenario, excepto Javier Marco (anterior batería de la banda) que abandona la escena y vemos a Jangitz a la batería, sin embargo la estela de Javier Marco aparece entre bambalinas y en los créditos aparece bajo la presentación de “amigo”. Nos ha parecido un guiño muy bonito, ¿cómo surgió la idea de este videoclip? ¿es claramente un homenaje a todo ese momento de cambios en la banda y a vuestro compañero?
JA – Teníamos claro que los videos de este disco fuesen sesiones en directo pero con algo más, con cierto punto de narratividad, con una idea de inicio / desarrollo / desenlace más cercana a lo cinematográfico. Sabíamos también que Chavi tenía que tener cierto protagonismo en todo esto, aunque no supiéramos bien cómo plasmarlo. Hubo una fase previa en la que expresamos todo esto al equipo con el que trabajamos (Arriguri y Badator), y ellos sugirieron recrear el acto de la foto de la portada del disco anterior antes de empezar con esta canción.
Lo has pillado bien, es tanto un homenaje a Chavi como una metáfora (por llamarlo de alguna manera) de ciertas ideas que están en el disco y en nuestras cabezas ahora mismo. Chavi se va para dejar sitio a Jangitz pero literalmente “aparece de vez en cuando”. Esta canción en concreto surgió de un ensayo con él (después de dejar la banda) en el que empezó a marcar el ritmo con la guitarra y a berrear unas frases de las que luego surgió la parte de voz de Andoni… Aunque ya no esté en el grupo tenemos lazos muy estrechos con él y siempre hay lugar para sus
aportaciones.

CPS – Muchos de los temas de los que hablais en este álbum parecen estar relacionados con cierto hastío existencialista pero abordados desde una perspectiva de lucha y reivindicación: el hecho de no dejar que lo que nos diferencia acabe diluido dentro de una masa gris, el trabajo que nos esclaviza alejándonos de nuestros sueños, etc. ¿Sentís que vuestra música es un medio de militancia para agitar los espíritus que viven adormecidos en la Matrix o es más un ejercicio catárquico para expresar y canalizar ideas y emociones?
JA – No está en nuestras manos controlar lo que puedan generar nuestras letras en quien las escucha… lo que tampoco quiere decir que estemos exentos de responsabilidad. Hay gente que se ha referido a ciertos temas del disco con un “esta canción hacía falta”, por lo que está claro que hay quién se lo está tomando como un mensaje dirigido a una generación o un colectivo. Por nuestra parte, como te contaba antes, hemos intentado estar más cerca de la elocuencia, con un contenido mucho más emocional que nunca. Sin una intención de generar respuestas concretas sino más en el plan de contarte algo mirándote a los ojos. Cuando te comunicas así, todo llega más directamente, sea para abrazarlo o para rechazarlo.

CPS – En “Ground for Dogs” rescatásteis un poema de William Blake, y para este nuevo disco habéis hecho lo propio con un poema del escritor vasco Erramun Maruri para el tema “Etsai, Orpoan”, ¿qué es lo que os resulta más interesante a la hora de componer la música para un poema escrito por otro autor? ¿qué os ha motivado a elegir los versos de “Etsai, Orpoan”?
JA – Esto viene de una rutina creativa por parte de Andoni. Si en un momento concreto está en el proceso de buscar frases o cierta chispa que le ayude a completar una letra, recurre a leer poemas para romper tendencias en las que haya podido caer o simplemente para refrescar la cabeza. A veces, se encuentra con alguna poesía con la que siente un vínculo enorme y le urge darle voz. En este caso son unos versos muy en la línea del resto de letras del disco, lo vimos al momento.
En cuanto a la parte instrumental, suele sacarnos bastante de nuestra zona de confort porque tienes que hacer justicia al texto, es el que manda y marca los tiempos. De esta conjunción salió una de las canciones más dinámicas del disco, con más transiciones y cambios, y creo que es por la naturaleza de la letra, que te hace viajar en cada frase.

Foto: Aitor Mendilibar

CPS – El tema “Militantzia Sutsua” tiene una estructura con muchos contrastes sonoros: gritos y susurros, graves y agudos que se van alternando, momentos de calma y momentos atronadores. Habladnos un poco sobre el proceso creativo de este tema, ¿todos estos matices sonoros van enfocados a generar una atmosféra intensa e inestable? ¿os gusta jugar y experimentar con las estructuras de las canciones llevándolas un poco hasta cierto límite?
JA – Te diría que no fuimos construyéndolo con una pretensión de partes concretas, sino que partimos de una atmosfera que fuese evolucionando (literalmente el tema empieza solo con una nota muy etérea que va aterrizando a medida que entran las bases rítmicas) sin saber cual iba a ser el final. Tampoco queríamos caer en el ambient, así que por eso supongo que ha resultado en algo tan «contrastado» ya que los elementos que rompen son ciertamente extremistas, que a la vez es lo que nos hace mantenernos activos todo el rato. La tensión calmada del principio acaba cortándose con su contrario (unos golpes muy definidos) para luego volver a cortarse con una parte relajada para luego volver a subir y acabar en un bucle mucho más terrenal. De alguna forma jugamos a hacer un tema que fuese excitante para nosotros mismos, con momentos para todo.

CPS- El universo artístico que rodea vuestra obra musical parece muy cuidado: el artwork de vuestros discos, vuestros videoclips, la puesta en escena, etc. ¿Hay una intencionalidad de generar una identidad contundente y coherente a través de la imagen? ¿Hasta qué punto os implicais en la creación de todo ese universo visual?
JA – Esto ha sido así desde el primer día y viene de la propia génesis del grupo, que es que Andoni y yo nos conocimos en clase de Dibujo en la carrera de Bellas Artes. De ahí viene todo, no te voy a vender que sea un proyecto multidisciplinar, pero es verdad que en nuestro caso va todo muy de la mano. Ahí es donde supongo que viene dada la contundencia y la coherencia, al ser nosotros los que dirigimos todos los aspectos artísticos del proyecto. Cuando al poco tiempo de empezar entró Alberto, también fue una cabeza pensante más en este sentido (el también tiene formación de diseño). Con este disco hemos seguido en esa línea, aunque como te comentaba hemos querido colaborar con profesionales externos para ayudarnos a dar forma a conceptos que nosotros por nuestra cuenta no íbamos a ser capaces de atar totalmente, como en el caso de la portada o los videos.

CPS – En noviembre del año pasado presentasteis “Vulk ez da” dentro de ZINEBI (Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao) en un espectáculo multidisciplinar que tuvo lugar en la sala BBK. ¿Fue un proyecto más relacionado con el ámbito de la Performance que os ha permitido interconectar varios intereses artísticos? ¿Qué supuso esta experiencia para vosotros?
JA – Totalmente, era un contexto muy distinto al que estamos acostumbrados. Sobre todo por la preparación previa, el tener que seguir un guión, cumplir con una escaleta… aspectos que en nuestros conciertos del día a día no tienen cabida pero que cuando te sorprendes ejecutando para un evento concreto te dan la ostia de aire. En este caso fue una combinación de videos, con nosotros haciendo versiones de nuestras propias canciones, algunas inéditas otras las habituales, y todo realizado en directo por la misma gente que nos hizo los videoclips. Fue una manera increíble de dar otra dimensión, al disco, a los videos, a las canciones, hacerlo todo más macizo precisamente afrontándolo desde distintos puntos. Nos ayudó a coger mucha confianza tanto para entender lo que estábamos haciendo, que es lo que te comentamos todo el rato, y para coger recursos que seguir usando en los directos, con mucha más espontaneidad e incluso “teatralidad” que los hacen más profundos.

CPS – Recientemente habeis pasado a trabajar con el sello discográfico Montgrí, quiénes se definen bajo la consigna de “huir de lo establecido” y “dar salida a propuestas que pongan el arte y la persona en el centro”. ¿Os sentís indentificados con estas declaraciones? ¿cómo surgió la posibilidad de trabajar con ellos?
JA – Claro! Somos amigos desde hace años y ha salido todo de una forma muy natural. De ir viendo que el camino que queríamos llevar nosotros con este trabajo y el que llevaban ellos con su sello coincidían en muchos aspectos y que era lo suyo aliarnos para unir fuerzas. No sabemos lo que es currar con un sello grande, pero dudo mucho que se pueda alcanzar el grado de confianza que da currar tan de tú a tú como nosotros hacemos. Estamos todos en el centro, nosotros y ellos, no hay dos fuerzas que tensan en direcciones opuestas buscando equilibrio, sino objetivos comunes que buscar y cumplir. Un chollo, vamos.

CPS – ¡Muchas gracias!
JA – Muchas gracias a vosotros!

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