Crítica de discos: Adrian Levi – «Unexpected»


levi

Adrian Levi
“Unexpected”
Autoeditado – 2018

Las primeras noticias que tuve de la existencia de Adrian Levi fue allá a finales de 2014, cuando publicó su primer disco “My Hidden Pockets” y recibí una nota de prensa. Poco después tuve la oportunidad de verle en concierto, en Electropura, donde ya dejó entrever algunos temas de lo que sería su segundo trabajo, “Under Songs”, publicado en 2016. Al conocerlo en persona tuve la impresión de que es alguien que tiene muchas cosas que decir, ideas que bullen en su cabeza y que asoman al exterior en forma de canciones. Ahora nos llega su tercer álbum, “Unexpected”, de una manera un tanto inesperada ya que su gestación tuvo lugar durante el pasado 2017 y no ha sido hasta hoy que se ha visto materializado.

Las canciones reposadas de Adrian Levi tienen su continuidad en este disco, en el que ha colaborado su amigo y músico habitual Carlos Soler junto al que realiza las tareas de producción, además de grabar, mezclar y masterizar, con la ayuda de Sáez que interviene en un par de temas. Esa atmósfera de melancolía que rodea sus canciones sigue presente, pero observamos un crecimiento en el músico, una sensación de madurez creativa y de explorar nuevos caminos, como ya se constata en la inicial “Red Monsters”, con una percusión contundente en contrapunto a las delicadas notas de piano. La voz rota pero apacible sigue presente, el sello propio de Adrian Levi. “Soft Rain Eyes” tiene un aire tropical, llevada a su terreno en el que gana luminosidad sin alejarse de la nostalgia con una hermosa melodía.

En ”Forgive This Time” encontramos la primera colaboración de Sáez a los coros en una suave y deliciosa tonada, seguida por la sobrecogedora “A Boy Named Sue”. La mayor presencia de teclados en el disco es una de las características que nos llama la atención, piano y sintetizador, además de ritmos programados que le otorgan un sonido particular aflorando en “Tower Of Control”, sin perder la esencia de las composiciones. Destacamos especialmente la épica de “Days Are Gone”, con Sáez a los coros y guitarra eléctrica, que trenza un ritmo infeccioso en una espiral ascendente. Aborda sonidos elegantes y aterciopelados en “Don´t Fail”, con la voz de Lucía Pardo en la que recuerdan a bandas como Lali Puna.

Por último, la acústica se mezcla con los sonidos electrónicos de “Put The Blame On Me” y un bajo obsesivo, cambiando de ritmo a mitad del tema con el que cierra el álbum. Un disco que va creciendo a cada nueva escucha, envuelto en un diseño exquisito, revelando su auténtica naturaleza emocional. Nuevas piezas con las que Adrian Levi ha ido experimentando para darles forma, obteniendo un resultado alentador.

Carlos Ciurana

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.