Crítica de discos: Wild Ripple – «Mal / Bien»


Wild Ripple
“Mal / Bien”
Autoeditado – 2020

Segundo disco de la banda valenciana Wild Ripple, tras su primer trabajo homónimo que se publicó en 2016, y en el que a la formación inicial de Manolete Blanco (guitarra y voz), Mario Aguilera (batería) y Miguel Izquierdo (bajo) se les une a los teclados Jorge Valle, ofreciendo un sonido más lisérgico, gracias también a la producción de Martín Guevara (miembro de Capsula) y grabado en los estudios Silver Recording. Con un velado cambio en su sonido aunque mantiene el sello propio de la banda, Martín Guevara ha canalizado la energía de Wild Ripple para concentrarla en píldoras que van de los dos a los cinco minutos, diez canciones en las que la psicodelia y el garage se dan la mano de manera más contundente, además de poseer unas letras singulares.

“Pánico” es el tema que abre el álbum, un trallazo potente y directo que despachan en minuto y medio con energía casi punk, rebajando el tempo en “Mandíbula” sonando más psicodélicos gracias a los teclados, cambiando a un ritmo frenético a partir de los dos minutos donde la guitarra de Manolete es protagonista hasta el final. Los efectos de distorsión se adueñan de “Cuatro perros” hasta un plácido cierre donde suenan unas notas de piano, mientras que en “Templo” el teclado es omnipresente, destacando un fabuloso solo de guitarra de Manolete Blanco con efecto wah wah donde culmina el tema. La sombra del garage más ácido acecha tras “Zombie Chamán” y el sonido del teclado, cambiando de ritmo, finalizando con un recitado y fade out.

El primer single que presentaron Wild Ripple de este nuevo disco fue “Directo al sol”, perfecto ejemplo de una canción con un sonido pop de menos de tres minutos, a la que le sigue “Una Luz”, concisa y breve en dos minutos, al igual que la aceleración punk en “Ácido”, otra ráfaga sónica que ha sido el segundo adelanto del álbum. Los sonidos desérticos stoner y un teclado ácido forman la base de “Ritual” y por último, el tema que cierra el disco, el que le da título, nos deja con una plácida sensación como si estuvieras flotando para cerrar este viaje. Un viaje en el que confluyen Led Zeppelin, 13th Floor Elevators, Deep Purple, Steppenwolf y The Sonics, donde Wild Ripple siguen evolucionando desde su debut, condensando la esencia de la banda en cada tema.

Carlos Ciurana

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